Funes, el arrogante
Así titula de pretencioso Marvin Galeas su editorial en El Diario de Hoy este día. La política es chuca, se los digo yo, pero estos dimes y diretes – aunque son comprensibles por el tiempo de campaña electoral- redundan en el resentimiento personal y hasta rayan en la envidia. Me da la impresión de que el columnista quisiera ser él el candidato a la presidencia (por Arena claro está).
[…] A más de dos años de un nutrido y vulgarísimo ataque contra todo aquel que piense distinto desde los centenares de blogs del FMLN […]
R/ Pues creo que los blogs son pequeños proyectos personales con un propósito definido y aunque ocurriera esa mini conspiración colectiva que plantea el Sr. Galeas todos los partidos tendrían sus pequeñas granjas de opinión.
[…] Nada es tan variable como las conductas y preferencias humanas […]
R/ En este punto estamos de acuerdo.
[…] La inteligencia emocional de Mauricio Funes, me tuviera en verdad sin cuidado si no pretendiera convertirse en presidente de mi país al que tanto amo […]
R/¡Qué sweet! pubishito Don Marvin. No se aflija, con que Don Paquito fue presidente y después de él Don Toño, no se aflija.
[…] Que escondió bajo un disfraz de entrevistador su militancia política […]
R/ Jajaja… Hay que ver la paja en el ojo ajeno, Marvin. Hay que verla.
[…] Con sinceridad creo que tanta lucha, tanto dolor, tanto sacrificio de tanto salvadoreño no fue para llevar al poder, aunque sea como fachada, a una persona que, como dijo un respetado analista, llegó tardísimo al reparto de inteligencia emocional […]
R/ Don Marvin, con todo respeto, creo que al decir esto peca de ‘adoctrinado’ por la derecha, le han colonizado sus escasas ideas y secuestrado su identidad. Más aportaría si escribiera con menos odio.
Si no hay nada escrito, no hay nada confiable
Editorial institucional de El Diario de Hoy. Sin duda alguna lo escribió Don Enrique Altamirano a quien se lo escuché decir con exactamente las mismas palabras en la entrevista que le hizo Jorge Hernández esta semana en Frente a Frente.
Sostiene para resumirlo de alguna manera que la candidatura de Mauricio Funes es «letra chiquita de contrato, de esa que no se ve» refiriéndose al lobo con piel de oveja con que vienen los rojos comunistas comeniños quema-biblias industriales de jabón mata ancianos . Creo que es un editorial sin mucha sustancia, el tradicional escrito de alguien enemistado con el pasado por los malos recuerdos de la guerra.
Convención de Derechos de los jóvenes
Doña Regina de Cardenal además de ser muy guapa e inteligente escribe siempre con mucho tino, por lo general sus juicios y opiniones parten de los principios religiosos del catolicismo y de la práctica layca de la comunidad familiar del Opus Dei. Expone lo ‘aguado’ de algunos artículos del Tratado Internacional en temas que se relacionan expresamente a las preferencias sexuales que se ocultan en interpretaciones dentro del tema de salud sexual y reproductiva.
[…] Si muchos de los problemas más grandes que tiene la juventud provienen de la iniciación de la actividad temprana –enfermedades, embarazos fuera del matrimonio, violencia, traumas,abusos, entre otros– es totalmente absurdo firmar un tratado internacional, que les otorga derechos para comenzar a experimentar todo tipo de desordenes sexuales, pasando por encima de los derechos de las personas que más los aman, buscan su bienestar desinteresadamente y son sus protectores legales: sus padres […]
Es un tema por demás polémico. Las preferencias homosexuales son un hecho, existen y no se pueden obviar, mucho menos marginar. Calificarlo como contrario a toda natura es – desde mi perspectiva- una posición válida. Pienso que deben aceptarse esas conductas pero no promoverlas ni legalizarlas. Por otro lado, el inicio de la actividad sexual a temprana edad es resultado de lo mucho que se han desatendido los valores familiares y el deterioro que ocasionan los medios con contenido de poca calidad. Ahora, tampoco es el fin del mundo ni el retorno de Sodoma y Gomorra, es la realidad del Nuevo Tiempo: ¡bienvenidos sean anticonceptivos!.
Otorrinonaringología y el transporte colectivo
Francisco Imendia invita a los buseros a que dignifiquen el gremio y se dejen de sinverguenzadas. Léanlo.
[…] Mejor reflexionen sobre la pobre actuación de su sector en los últimos años. El diésel les sobró, producto de subsidios y prebendas. Nunca se reconvirtieron. Además con administraciones de pulpería no van a ningún lado. Nunca adquirieron autobuses, en los últimos 30 años, salvo la chatarra amarilla, con todo y llantas demedia vida, que importan del norte (y en
el norte ¡bien contentos!) […]
Dada mi condición de roja comunista come-niños quema-biblias, no puedo más que estar de acuerdo con tu postura ante el ¿Editorial? de Marvin Galeas; El Diario de Hoy, como el CoLatino, no parecen alejarse de su naturaleza panfletaria, cosa que irrita, pero EDH parece ni siquiera reparar en la falta de sustancia de sus ¿Editorialistas?.
Y sólo debo recalcar algo sobre lo escribió la esposa de Luis Cardenal:
«…es totalmente absurdo firmar un tratado internacional, que les otorga derechos para comenzar a experimentar todo tipo de desordenes sexuales, pasando por encima de los derechos de las personas que más los aman…»
Es de recordarle a la señora que el derecho es, ante todo, una facultad INDIVIDUAL [me brinco lo absolutamente ofensivo que me resulta ese párrafo, centrándome simplemente en ese desliz].
Me parece que el «analisis» que el pseudo-periodista, Marin Galeas, pretendia hacer con respecto a Mauricio Funes, no es mas que un AUTOANALISIS de su conducta, forma de ver la vida y de comportarse con la sociedad que lee los articulos insustanciales que escribe, ya que no hace mas que alardear del amor que tiene hacia su patria, cuando todos sabemos que amar a tu pais es estar enterado de lo que le pasa, si en realidad se sintiera ofendido, deberia empezar a poner de su parte y contribir en cuanto al area que le compete (el periodismo); ya que la verdad no entiendo como desperdicia el poder que tiene en sus manos y lo aplica de una manera tan arrogante, sin sentido y con una gran dosis de ignorancia.
[…] escribir esto, solo me acuerdo de aquella entrevista donde el pseudo-periodista Marvin Galeas (el autodenominado analista político) decía «que no conocía nadie tan afanosamente empeñado en […]