No se metan con Lumbago

Mi compadre el Chino Alex está ingresado en el hospital desde ayer en la mañana. La cosa fue así ve:

El lunes me llamó bien temprano para pedirme que lo llevara al seguro a pasar consulta porque le dolía la espalda desde que el domingo en la noche anduviera de mozo levantando cajas y bolsas de camisetas para regalar. Mi compadre y abogado estrella por andar de buena gente y entregado a sus causas y convicciones siempre se lo lleva putas, pobrecito, se quejaba del dolor como la gran puta.

Bueno, lo llevé ahí al seguro (una de culos que andaban) y tras echar mano de unos contactos nos atendieron no sin antes irnos a echar un cafecillo a la cafetería, cagado de la risa el doctor, ni parecía doctor le dije al chino cuando tuve oportunidad, que más tenía cara de contador. El Dr. amigo nuestro nos empezó a contar de unas bichas de San Marcos reinas de belleza y de que había servido honores para fungir como «padrino de uñas» de una cipota y bla bla bla.

Total que entramos ya a lo que era el hospital vea y a mi medio me sacó de onda y me destripeó porque mucho olía a hospital. Inevitablemente me acordé del Hospital Rosales.

Me fui a comprar uno de los que El Trompudo insiste en llamar cariñosamente El Diablo de Hoy y me puse a pilear ahí en las sillas ‘desas’ igualitas a aquellas en las que pasábamos las madrugadas durante los turnos de la radio.

Pasó consulta, le puyaron el culito con una inyección… pasamos a Punto Seguro donde me encontré a Condorito, cómo se creció el maje ese. Increíble cómo esos cabrones que antaño ponía yo quietos y que me podrían verguear ahora (aunque con esfuerzo) me siguen otorgando el mismo respeto y estima de la amistad de entonces. Nos mandó a farmacia a esperar las medicinas.

Un gran desvergue allí porque había un error en la presentación de la receta y no jé qué. Total, lo resolvimos.

Mientras esperaba a que se resolviera lo de la receta, me puse a platicar con una chavita choquita bien bonita que estaba allí pasando consulta por una molestia en su ojito izquierdo. Bien bonitos los ojos de Maribel, me contó que trabaja en el Banco de América Central y, cuando dijo eso, me acordé del ‘Malía’ pero más que de él, me acordé de Martha. Espero que le esté yendo bien.

Salimos rumbo a la casa del chinese.

Según parece al cabrón se le complicaron las cosas durante la noche y amaneció jodido. Lo ingresaron. Me mandó un SMS diciéndome que estaba bien pedo con el medicamento.

¿Qué es el lumbago?

Click en la imagen