Mi hermanito tiene un camión Tonka y cuando lo vi no pude resistirme a la tentación de: primero, ponerme a jugar con el camión y, segundo, tomarme una foto.
A mi los camiones esos me maravillaron desde la primera vez que los vi cuando tenía como 5 años, eran una gran cosa. Ya no los hacen como antes: la globalización ha sacrificado mucho el concepto de calidad en su afán por reducir costos y competir en base a precio.
Luego, cuando vi hace algunos meses en la televisión un reportaje sobre las minas de cobre en Chile y vi esos camiones mineros tan gigantes volvió a despertar en mi esos recuerdos de su cómodo y olvidado letargo con la nostalgia que a veces la lejanía de aquellos años de infancia me hacen sentir.
Poco a poco en mi vida dejan de tener sentido frases para mi mismo como «Cuando sea grande»…
Bueno, era solo una idea. También ese día me comí una bolsita de boquitas:
vergones esos hijos de puta, sergio también tuvo uno cuando pequeño… pasábamos haciendo desvergues con esa onda, paloma el tonkamion
ja! bolsita
chikitiya la bolsa vos XD